1625 - Alonso Hernández del Portillo - Prólogo
Para ardua y para mayores fuerzas que las mías emprendo en atreverme a hacer historia de la muy noble y más leal ciudad de Gibraltar por muchas cosas que para la hacer me faltan; pues siendo así que yo soy el Primero que se ha puesto en esta ocupación, forzosamente me han de faltar de las que el deseo y curiosidad humana pide en semejantes obras.
La materia es seca y dificultosa por lo poco que de esta Ciudad famosa hay escrito, así por los autores extranjeros, como por los nuestros; y difícil por la confusión que hay entre ellos; pero el amor de la patria, que a todos los buenos obliga a mirar por sus cosas, me movió como a natural de esta Ciudad a escribir eso poco que escribí, busque y entresaque de diversos autores que muy de paso van contando sus cosas;
siendo esta ciudad tan de estimar como la han estimado nuestros Reyes honrándola y privilegianla mas que a otras, dándole honrosos títulos y escudo de Armas con blasón de Mas Leal; y finalmente insertándola en los títulos de la Corona Leal.
También me movió a este trabajo tentar si pudiese deshacer algo de la confusión que tiene los Autores en el nombre y sitio de Cartagena, Mellaria, Tarifa, Islas Gades y por otras más razones. Será pues conveniente para el que quisiera ocuparse leerla tener en la memoria algunos presupuestos para que se entienda mejor lo que dijese.
Hace de presuponer que la Historia consta de dos partes que son verdad y tiempo, como el compuesto del hombre de alma y cuerpo, que faltando uno de estos ya no es hombre; así no sería historia si les faltase cualquiera de las sobre otras partes. Pues en esta yo afirmo que he procurado decir verdad cuanto a mí ha sido posible; y si en algo fuere falta, será sin culpa mía por haberlo así leído, oído o de otros sabido.
La misma diligencia se ha hecho en el tiempo aunque parece en algunas partes que yo no concuerdo con lo general, como es en el año que primero de ganó Gibraltar en tiempo del Rey Don Fernando el Cuarto, que dicen algunos que fue año de 1310, yo hallo por mas cierto que año de nueve se ganó, por los testamentos de la casa de Medina, que veremos adelante; el uno es un epitafio de Don Alonso Pérez de Guzmán, fundador de esta casa que está sobre su sepultura que dice que murió año del Cesar 1347, Viernes 19 de Setiembre, que a la cuenta por el ciclo solar parece letra Dominical de aquel año E y 19 de Setiembre Viernes:
y en las conexiones de los años concuerdan estos dos. Es esto una buena curiosidad para enmendar el tiempo, y muy oportuna para la historia. También se advierta que cuando se dice que un Autor erró, no por eso se le quita la autoridad y crédito principalmente Ocampo y Ambrosio de Morales que fueron hombre muy sabios y muy leídos, y les costó mucho trabajo sacar a luz de unas tan oscuras tinieblas la Historia de España; pero fueron hombres, y no pudieron andarlo todo, ni verlo; y no es mucho escribiendo tanto errar algo. 'Nam quandoque bonus dormitat Homerus' .
Hace asimismo de advertir que cuando yo digo me parece, debió ser, es buena conjetura o es verosímil; no afirmo aquello sino que queda en opinión. E porque esto creo no llegará a imprimirse sino que morirá en manos de quien la hizo sin salir a luz no lo pongo dedicación a este Discurso; que si la hubiera, habiendo ser a alguno de los Caballeros de esta Ciudad a quien yo soy obligado por las continuas mercedes que de ellos recibo o a el Ayuntamiento que es casa suya propia, para que me defiendan de las malas lenguas; que pues todos los Autores cuantos hasta hoy han escrito en cualquier ciencia no dedican sus obras a otro fin, sino este, aunque muy letrados sean, y útil lo que escriben, sin comparación tendré yo mayor necesidad de protección, cuanto menos de defenderme de todos;
solo ahora tomo por mis defensores y protectores al vendidísimo Jesús Dios y Salvador nuestro y a su bendita Madre la Virgen Señora María y al glorioso Arcángel Raphael, y en su nombre comenzara este discurso.